Nos detenemos un instante, ojos cerrados y mente abierta, respiramos profundamente y buscamos en el interior cual es nuestra verdadera identidad. Sin demasiado esfuerzo encontramos aquello que nos hace sentir bien, fortalezas, valores, capacidades que nos refuerzan en la intimidad o de cara a los demás. Sin embargo, decidimos profundizar un poco más, ambiciosos de hallar nuevas luces que alumbren aun más nuestro ya emergente ego, cuando sin previo aviso, aprovechando que la auto-confianza del momento ha dejado el alma al aire, comienzan a emerger sombras desconocidas u ocultadas intencionadamente para protegernos del entorno. ¿Que opción tomamos?. Podemos seguir ocultándolas escondiéndonos detrás de un caparazón de cristal que nos hace brillar ante los demás pero que nos mantiene en un estado constante de tensión e incertidumbre porque conocemos su fragilidad y tenemos la certeza de que en cualquier momento puede quebrarse en mil pedazos y dejar ver la oscuridad interior a nuestro entorno.¿Porqué obramos así?, ¿acaso no confiamos en la bondad de nuestros seres queridos?, ¿para que enseñamos una persona que no somos realmente?, ¿no estamos engañando a todos, empezando por nosotros mismos?
.El buda de oro.https://www.youtube.com/watch?v=ZZ5Sqk06fDQ
LUCES Y SOMBRAS
domingo, 17 de marzo de 2013
Publicado por
Santiago López
en
11:47
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